Yo no sé de dónde vengo ni mi propósito en este mundo o en esta vida, desde que era joven una guerra comenzó : mis padres lograron huir exitosamente, pero yo y mis hermanos no pudimos seguirlos. No sé el motivo, pero mis padres no nos dejarían a nuestra suerte. Nos llevaron a un escondite donde había mercenarios, unos ya eran veteranos, héroes de decenas de batallas, creía que mis padres nos dejaron para que ellos nos protegieran, pero me equivoqué, nos usaron para trabajar. Pensaba que ese sería nuestro único pago por estar seguros en ese sitio pero me comenzaron a entrenar. Al principio me negué, no quería apartarme de mis hermanos, pero me persuadieron con sus métodos de chantaje; duré quince años sometiéndome al entrenamiento y aún desconozco la razón de porqué fui escogido entre tantos que estábamos ahí.
Ya he acabado mi entrenamiento, me enseñaron a olvidar mis emociones para no tener impedimentos en batalla, de esa forma no tendré remordimientos, no me preocuparé por los demás porque me dará lo mismo, no vacilaré en dañar a otros, no me tomaré nada personal porque nada me hará enojar: soy una maquina que cumple ordenes.
Mi escuadrón y yo nos dirigimos a asesinar al joven príncipe de las fuerzas enemigas, el cual se ha ocultado en un pequeño pueblo en donde se mantiene lejos del peligro. Su padre está en el frente, ya es algo viejo y no tardará en morir, de esta forma no habrá quién ocupe el trono, el gobierno que nos contrató no nos asigno esta misión, sólo nos pagan por ayudar a sus tropas. Nuestro líder opina que a el rey no se le puede dañar directamente, hay que atacar su corazón y su mente, sólo debemos perturbarlo, confundirlo y qué mejor forma que con la muerte de su hijo y así sus soldados también serán afectados, lo que hará más fácil el triunfo en la guerra y ser retribuidos. Vamos de incógnito para evitar sospechas.
El equipo está conformado por 7 incluyéndome:
*Áspid (venenos y arquería) 27 años
*Faetón (combate cuerpo a cuerpo y enfermería) 30 años
*Kaia (doble espada) 22 años
*Isaura (asesinato silente e infiltración) 20 años
*Aurora (camuflaje y espionaje) 18 años
*Num (tortura y uso de armas pesadas) 44 años
*Yo: Thot (explosivos) 21 años
El plan es simple: entramos como viajeros comunes y nos asentamos cada quien por su lado, si en un mes el príncipe no está muerto destruimos la aldea entera.
Thot: ¿Quién irá primero?
Áspid: No tenemos líder, está claro que no podemos llegar juntos, sugiero que vaya Isaura.
Isaura: Está bien, yo sola podría encargarme del príncipe en un día...
Faetón: Tal vez, pero sus guardias te harían pedazos.
Num: Faetón tiene razón, dudo que venga solo
Aspid: En ese caso Aurora irá.
Faetón: Deberíamos votar ¿no lo creen?
Kaia: ¡suficiente! Irá Aurora, es la más adecuada.
Aurora: Estoy de acuerdo.
Thot: ¿Y luego quién?
Áspid: Eso lo decidiremos mañana.
Son las ocho de la mañana y Aurora ya encontró hospedaje, en este momento está deambulando, observando el panorama y a la gente. Dentro de dos días enviaremos a Isaura, por lo pronto ese es el plan, aún no escogemos a otro.
Isaura ya está en el pueblo y Aurora tiene una lista de sospechosos pero dice necesitar más tiempo para aclarar dudas. Mañana le toca ha Áspid y Faetón, quienes alistarán nuestras "herramientas" ahora nos queda esperar unos días más para enviar otro elemento, ellos sólo deben socializar un poco en este lapso de tiempo y actuar naturalmente, lo mas fácil del trabajo.
Han pasado cinco días y es el turno de Num, a estas alturas Aurora se ha vuelto más popular en el pueblo, la califican de mujer ejemplar e incluso ya tiene pretendientes, su lista ha decrecido y cada vez se acerca más a averiguar quién es el príncipe; mientras tanto nuestras armas aguardan esperando a que su filo se utilice.
Cuatro días ha desde que Num llegara, ahora Kaia y yo estamos dentro, es una suerte que nos filtráramos en una caravana de sobrevivientes, de esta forma despistaremos mas convincentemente.
Ya establecidos procedemos con nuestro trabajo, nos reunimos en el lugar donde Áspid se resguarda, es el más amplio y adecuado, comenzamos repasando los sospechosos: quedan tres principales, serán observados para aclarar quién es el indicado, sólo tenemos la mitad del tiempo, quince días, debemos apresurarnos.
Ya sabemos quién es el príncipe, nos alistamos y dirigimos sigilosamente, se encuentra en una pequeña choza, algo bien pensado, Áspid con su infalible puntería termina con los guardias, yo permaneceré afuera con Áspid y Num, el resto se infiltrará, sólo espero que hagan lo que les corresponde.
Kaia va al frente, luego Aurora, Faetón y finalmente Isaura cuidándoles la espalda.
Kaia: Con este ya van veinte y uno .
Isaura: Claro, yo llevaría el doble si estuviera al frente.
Faetón: Te lastimaron el brazo .
Kaia: Veo algo, es una puerta.
Faetón: Está bloqueada y no hay duda de que lleva al subsuelo.
Aurora: No creo que la podamos abrir fácilmente, iré por Thot. Mantengan la posición
Isaura: Espero no se tarde, quizá este sea un pasadizo que lo lleve a un sitio seguro.
Kaia: Más guardias, esto comienza a ser tedioso.
Faetón: Vámos, sino esto no sería un reto.
Isaura: Hace mucho que no practicaba, espero no estar desentrenada...
Áspid: Alguien viene...
Aurora: Thot, te necesitamos, ven con explosivos, de hecho vengan todos.
Kaia: Creo que ese era el último de los guardias.
Isaura: Ya era hora ¡Deprisa! no podemos fallar.
La puerta ha sido derribada, debemos actuar rápido, por lo que sabemos este pasaje seguramente es su boleto de escape. Nos abrimos paso acabando con quien se nos ponga enfrente, ignorando por completo todo sólo esperando terminar con los enemigos. Hemos llegado al final del camino, el príncipe está frente a nosotros,se interpone entre él y nosotros sus guardias de elite: Áspid envenena sus flechas y retrocede, Kaia se estira un poco y descansa los brazos, yo sólo, con mi espada, permanezco atrás con Isaura y Aurora. Num empuña su hacha de doble filo con ambas manos y Faetón está preparado con su espada, sólo la presiona con fuerza para no soltarla. Todos están quietos, se escucha solamente el palpitar de nuestros corazones y nuestra respiración, entonces Num, el más veterano de nosotros, sostiene mi mochila y le dice a todos que se preparen para la retirada. Todos lo respetábamos por lo cual, a pesar de vacilar, nos preparamos para salir, se le acercó a Áspid y le dijo en voz baja que le disparara al príncipe, Áspid siguió la indicación entonces casi al instante, con un fosforo encendió mi mochila, sabía que eso significaba nuestra salida. Huimos de ahí a toda prisa, atras de nosotros quedó un infierno de fuego y explosiones, salimos todos con vida y sin detenernos dejamos el pueblo.
Por Gaia
No hay comentarios:
Publicar un comentario